viernes, febrero 04, 2011

La bitácora de Rolando Denver

La tomè con las dos manos y leì en su portada: The legendary notebook of Hemingway, Picasso, Chatwin, Rolando Denver. Traìa el olor a nieve de Nueva York y ahora pertenece a las palabras de Limbo city. Algùn dìa, me dije, visitarè la librerìa de donde me la trajeron y escribirè en varios idiomas tu nombre y lo echarè a rodar por  el  Central Park. Todas las bolas de nieve se deshacen, menos las palabras. Olfatiè su plàstico, la abrì, su negra portada y pequeñas hojas. Es tan preciso el destino, vivo en un paìs  que tiene forma de S recostada  entre los dos más grandes océanos del mundo y la selva como un manto de piel verde, exuberante. Tu nombre significa selva, lo que me rodea y hace respirar. El destino, despuès de todo, es algo tan personal. Tiene tantos aeropuertos como andenes, simples paradas. La bitácora salió  del MOMA y ya se sabía su destino de antemano. El encargo era una pequeña libreta, un detalle en el abecedario del papel. Un fetiche para cargar en la levedad íntima de la palabra. Escribir y corregir el verbo en un mismo espacio. Poner en ruta la poesía y la memoria. Nadie sabe cual será la primera palabra. ¿Vocal o consonante? Con cualquier verso verdadero se hace la poesía. El territorio es la pequeña página en blanco a rayas para que la caligrafía tome un curso recto. El poema abrirá la oscuridad de la página en blanco. Le otorgará un santo y seña ya convenido, tácito en lo inesperado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hey que tal? Veo que ya tienes una Moleskine jaja....mira ahora yo también tengo un blog...aunque funciona mas bien como portafolio...si quieres échale un ojo...


Saludos,



http://nancysg.tumblr.com/