El Papa Francisco es un viejo hincha y socio del San Lorenzo de Almagro, uno de los cinco equipos grandes fútbol argentino conocido como el cuervo y con una centenaria historia. Cuando salió humo blanco de la Capilla Sixtina y fue investido posteriormente como Papa, el primer latinoamericano en la historia milenaria de la Iglesia Catòlica, el jesuita Jorge Mario Bergoglio, Francisco, fue identificado con la camiseta del San Lorenzo, club de sus amores y bendiciones.
Ya en la silla de Pedro, vistió la camiseta alba del Vaticano, pero siguieron las romerìas para llevarle casaquillas de otros clubes y de jugadores emblemáticos, como Messi por ejemplo, el "àngel guardiàn del Barcelona". El argentino Pupi Zanetti, una figura legendaria y capitàn del Inter de Milàn, también se acerco con el escudo de su club ante el nuevo Papa.
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