El reconocido dibujante argentino, Carlos Nine, dibujó hace cinco años la confusa escena, donde El Quijote de la Mancha, casto señor de todas las Españas, defiende su absurdamente acosado honor, de Maritornes, mujer de posada y carnes amplias. El trazo del manchego caballero y de la supuesta rival en el delirio quijotesco, de su amada insigne, Dulcinea, fue impreso en esa fecha, hace cas iun lustro, en el libro Lanza en astillero (yo diría en ristre) ,que se distribuyó a los alumnos de quinta de primaria. La inocente caricatura de Nine, sirvió para que el conservador Partido Popular, denunciara su alto contenido erótico, páginas que parecen sacadas del Kamasutra. Y también han dicho: kamasutra educativo. De paso, se calumnia a Maritornes, que no buscaba precisamente al caballero de la triste figura, quien se obliga a emprender una maroma para salvar su honor y el de Dulcinea del Toboso, sin haber motivo, como tantas otras escenas del clásico Quijote. El Hidalgo termina envuelto en una de esas palizas memorables de sus aventuras de caballería.
Carlos Nine ha dicho a Clarín de Buenos Aires, que "cuando los del PP dicen que en lugar de Cervantes es el Kamasutra me parece que se les va la mano. Además, el problema es con una página en concreto que sigue a la novela. " Se habla ahora de un Quijote pornográfico y fue retirado el texto de las escuelas.
La estupides también es un clásico en ocasiones.
(RG)