Qué será del poeta Oliver Welden, mi querido y único traductor de este febrero emblemático, ya en la memoria de los tiempos que asoman y desaparecen como viejos lobos de una extirpe en extinción.
Vaya fecha este 20 de febrero del mes 2 en el año 2020, cuando todo va y viene con el viento de una época absolutamente nueva. Ciertamente otras banderas se agitan y hasta los muertos desfilan por su libertad emancipadora.
Las fronteras son el hilo más delgado de estas palabras y quienes las irán hilando, tejiendo en el nuevo abecedario de la historia, aunque hoy no tengan nombre o no hayan nacido, el futuro dibuja y traza sus rostros que recorrerán las grandes avenidas y plazas públicas.
La poesía, viejo poeta y amigo, sostiene firme el timón de la vida, el amor, la solidaridad, las cosas simples, la felicidad y la esperanza.
Un poema es la estrella inalcanzable que sin embargo brilla en nuestros sueños y en algún momento alcanzaremos como un racimo de uva.
La palabra es la más formidable aventura de nuestras voces humanas en los desiertos, selvas o en las grandes ciudades, donde el cemento y el acero erigen sus formidables muros de silencio.
El mundo es la vieja rueda que no deja de rodar en cualquier dirección para no detenerse y volver a sus infinitas inagotables praderas de la abundancia. Paraderos ciegos aparecen y desaparecen en la rutas y los pasajeros desconocidos atraviesan desiertos, mares, ríos y carreteras como aves migratorias hacia veranos e inviernos inciertos.
Què serà del poeta Oliver Welden, me viene a la memoria el amigo en el mes de febrero, en fechas personales, mi traductor en este mes verianego y cumpleañero. Se transformò en una tradiciòn que Oliver escogiera algunos poemas escritos en el mes de febrero y que ya forman parte de este viejo Blog, que en octubre pròximo cumplirà 15 años.
Nada sabe nadie y la fecha no es olvido.
Rolando Gabrielli©2020