¿Una ciudad llena de poetas?
Adónde me has traído camino,
a vagar por tus calles llenas de ofertas,
gente apresurada que camina en dirección vertical,
horizontal, perpendicular, transversal,
sin más destino que el Metro ?
Me quedo con las palomas
en la Plaza de Armas,
que aspiran a unas cuantas migajas de pan.
Las leyes prohiben mirar fijamente,
más de dos veces a una mujer,
en estricto orden
me siento a observar
el desplazamiento de las masas
en ese desencuentro del anonimato,
el no saber que viven y comparten
un mismo lugar, si les diera la gana.
Milosz se pregunta: ¿Qué clase de poesía es aquella
que no salva Naciones
o pueblos?
No sé si es ingenuo o
así se pensaba en otra época
o realmente es
probable que pueda ocurrir.
Los poetas que han
dicho algo en esta ciudad,
están muertos o al
borde del epitafio,
síntesis de lo ya
dicho.
Rolando Gabrielli©2018
Santiago de Chille/diciembre