rezaba la profecía en algún lugar de la promesa.
Viento al viento que algún peregrino las repetirá,
en puertos, islas, altas montañas nevadas.
No has arado en vano en la página en blanco, poeta,
las palabras son el río y contienen todas las aguas
que volverán a su curso para ser puente en la oscuridad.
Palabras sin dueños, palabras al amanecer de las palabras,
nacimiento de nuevas voces,
mudos silencios,
el mar, el mar.
Rolando Gabrielli 2022
Se puede viajar solo viajar,
ir a un lugar sin dejar,
de atravesar el día sin pensar,
solo viajar banalmente, seguir,
vivir la carretera, monologar
construir un paisaje,
si fuera
necesario,
entrar en la imaginación
de cuantos hicieron la misma ruta,
sin buscar compañía
aún si todo fuera monotonía.
El placer de correr,
dejar pasar el tiempo,
sin buscar aproximarse a nada,
no comprometer siquiera un posible
cansancio, solo viajar, convertir el
viaje
en lo más parecido a la libertad
Rolando Gabrielli2022
Me encantó su obra,
dice más de lo que ven mis ojos.
Sé que estas palabras
no le dirán mucho o nada,
pero nacen de lo más profundo
de mi alma de Ghostwriter.
Un fantasma no regresa,
para pasar desapercibido
y volver a equivocarse.
Rolando Gabrielli 2022
sin tener nada que decir,
aparentemente, repetida,
en un horizonte desconocido,
sobre el mantel del día,
blanco espejo donde miras
y esperas descifrar lo ignorado,
en el oráculo del poema,
una espléndida mañana soleada,
simplemente.
Rolando Gabrielli 2021
El oscuro disfraz de la retórica,
es lo que no quisiera dejarse ver,
con su vieja utilería, formas caducas,
maniáticas costuras, palabras
apropiadas,
difícilmente aceptables para el autor
y posiblemente se cuelen en un discurso
a plomo en caída vertical,
palabra por palabra,
como si el poema estuviera
frente a un jurado para ser juzgado.
Una dosis de silencio involuntario,
podría permitir una salida honorable,
si esa fuera la propuesta,
más que airosa,
por el interés
más bien
del lector que del poema.
Rolando Gabrielli 2021
El río sigue su curso,
es una manera de decir,
me dices,
sin reiterar más que lo afirmado,
todo está por caminar
después de todo.
Es espléndido adjetivar un poema,
sin temor a ser reprimido
por los estudiosos de la temperatura,
la fuerza del verbo sobre la palabra,
el verso en su conjunto influenciado
por un adjetivo insuperable.
La gramática es inútilmente bella
para mí cuando no tropiezo
con alguna impureza sustantiva,
algo que se sostiene por estar
al margen del poema
y se mantiene como un viejo trapecista,
sin red, solo por oficio,
cumplimiento del deber
con el público lector,
que es quien debiera indagar
en cada palabra, intención,
suponer lo que no se dijo
y pudo ser la intangible palabra
o el verbo más valioso,
que no siempre encontramos.
Rolando Gabrielli 2021
lo que el viento sopla
No solo son hojas que caen
bajo su peso y silencio,
alguna novedad que aún
no sabemos, ni vislumbramos
está por venir
Será noticia en otro lugar
lo que aún desconocemos
El tiempo no tiene origen
en las palabras
Alguien vendrá detrás
de las cálidas sombras
de la noche del verano,
tibia y tú la conoces
Es una cuerda inalcanzable
¿Su música son tus pasos,
me pregunto?
Descalza te traerá el viento,
por la montaña,
de la orilla al mar.
Rolando Gabrielli 2022
En el paisaje la soledad
no necesita testigos y protagonistas,
menos representantes,
el horizonte sostiene su principio y fin.
No te ausentes, digo, más allá del más allá,
es una causa perdida el olvido.
Todo suele quedar en nada.
Rolando Gabrielli 2021
No
pertenezco a ninguna vanguardia,
ni
generación invisible o por descubrir,
soy una de
las tantas piedras del camino
y no es un
manifiesto más, ni una confesión,
sino solo palabras más o menos
a la deriva, intemperie del poema.
¿Objetividad
o subjetividad,
el yo
abierto, romántico o la tercera persona
del no fui
más que el otro en el plural?
Años llevan
los ventrílocuos del verbo
descubriendo,
anunciando nuevas
formas
poéticas, enseñándonos
que el
poema de ahora no es el de antes,
cual es el
camino de la imaginación,
de lo
concreto a un nuevo concepto,
la fórmula
secreta de algo tan personal,
íntimo, arcano,
misterioso, desconocido,
que es
avanzar más allá de la infancia
sin que nadie lo note,
ni abandonarla del todo.
A mis mayores
debo esto y más,
sabios
consejos de donde se parte
y cómo se llega adónde sea posible
y nadie sabe a ciencia cierta.
Rolando Gabrielli 2021
