sábado, mayo 08, 2021

Narciso me mira


 Narciso me mira

en su espejo

y me recuerda:

no somos tan diferentes.

El espejo sonríe.

Rolando Gabrielli 2021

lunes, mayo 03, 2021

Al porvenir de las palabras


 

Los poetas malditos  descendieron a los infiernos,

con sus palabras salvaron quizás nuestras vidas,

 ávidos lectores tocados fuimos por su magia

y el encanto alucinante de sus palabras

despertaron  nuevas voces en nosotros,

que seguirán cantando,

y nada, ni  nadie  negará  la posteridad.

2

Desconocidos fuimos, en principio,

simples violinistas de los abismos,

y seguirán otros este  desafío, pasión,

beberán  de sus propias  palabras,

aunque todo  parezca pasado de moda

o absolutamente innecesario, banal, incierto,

algo excéntrico tal vez, romántico,

aún así, nacerá la rosa en la oscura  palabra.

Brindaremos entonces,

por  los que cultivaron sueños

hasta la saciedad en cada una de sus palabras

y alucinaron por todos nosotros,

en bares, manicomios, cárceles,

en los subterráneos de la diáspora,

en las calles  de las grandes ciudades

de ruidoso, contaminado silencio

de voces y voces,

solitarias, sordas, mudas,

ecos  sagrados y de culto

por la palabra. 

3

Padres nuestros de la poesía,

inclino mi frente, me confieso,

ante todos vosotros, sin excepción,

pecador de todas sus palabras

y  fuegos que aún están por alumbrarnos,

con sus incandescentes cenizas y huesos,

la sagrada y díscola página en blanco.

¿Qué  hemos visto  sin ver,

en esta  historia sin fin?

Las mejores horas siempre están

por suceder para agitar los  nuevos tiempos

del porvenir. 

                                                       Rolando Gabrielli 2021

domingo, mayo 02, 2021

El día que murió Alejandra Pizarnik

El día que murió Alejandra Pizarnik,

la muerte  estaba afilándose las uñas,

simulando que se disponía tomar un café

y seguir fumando, devorándose un poema,

presumía de lectora de Alejandra:

“Vida, mi vida, déjate caer, déjate doler, mi vida,

déjate enlazar de fuego, de silencio ingenuo,

 de piedras verdes en la casa de la noche,

 déjate caer y doler, mi vida”

La muerte siempre es perra

y presume de inocente,

se las ingenia para ser incluida

en un poema, biografía, epitafio,

es la cereza del pastel,

la burda pareja  íntima de la vida.

Rolando Gabrielli 2021