El presente es mi futuro,
ninguna palabra designa mejor a otra
y si alguien cierra el círculo,
se abrirán nuevas páginas
leídas quizás por desconocidos
y nada seguirá en un mismo lugar,
no será cuestión de fechas ni estaciones,
las rosas cortadas una y otra vez
reconocerán por qué las escogieron
sus destinatarios.
Los búhos verán la ciudad con ojos nuevos
y no solo los neones nos alumbrarán
un nuevo amanecer.
Rolando Gabrielli