lunes, febrero 08, 2016

Aquí te encuentras

Aquí te encuentras,
palabra,
pronunciándote
sobre un mar de automóviles
 y odiosas bocinas,
calles apestosas llenas  de vallas de publicidad,
luces capitalistas, putas sin nacionalidad,
pervertidos  solitarios amparados por la ley
y toda la arbitrariedad de un sistema podrido
que aletea como cuervo sin ojos
y sangre de ángeles en sus picos dorados,
falsos metales de la modernidad.
Una ciudad cualquiera sostenida
en el  vidrio y el acero,
 el sol brillante que la cubre y refleja.
Solo el mar  se baña asimismo y la espera,
visible, inmenso en la bahía, pacientemente,
en la infinita superficie de sus horas,
el tiempo pasa, no busca compañía.
¿Quién eres tú para decirlo,
si en la otra esquina  los parlantes
 llaman a ganar un lugar  en
el paraíso?
Arrepiéntete, arrepiéntete,
 has subido todo  comerciante
hasta la tela más insignificante,
se ha ido a las nubes inalcanzable.
Ve a  Fenicia y corta la seda
con tus  dientes
y muerde el gusano si lo deseas,
pero no dañes mi pobre bolsillo vacío.
Nueva York, Shangai o Amsterdam
podrían leer su futuro en estas calles,
tendrían  una oportunidad de volver a nacer
y dejar que sus puentes vuelvan
sobre tus pasos, amada mía
a  devolvernos la voz y  la palabra
de los muertos que se niegan a morir.
Que otros amueblen sus ciudades
con tus ojos, risas  locas,
grandes zancadas 
y la luz de tus  días
de frescas azaleas   conviertan  los inviernos
en blancos puentes de algún lugar
y palabras desconocidas.
Tú estabas escrita en el viento
y de nada se arrepiente mi lectura
de Norte a Sur.

Rolando Gabrielli©2016

1 comentario:

Anónimo dijo...




Hoy a las 11:51 A.M.






uy con què poema amanecì : "Aquì te encuentras" tremenda verdad dicha poèticamente, ciudades armadas para la venta, del orden de la necesidad , mercaderes que venden las estampitas ja que escena aquella donde el personaje de jesùs entra en ira y tira las mesas de las ferias donde se vendìan estampitas, el capitalismo ya arrancaba, una escena muy interesante, cuidades fenicias, sòlo negocios, y el sujeto? es decir....la palabra, ya que lo que nos diferencia es la palabra tan objetalizada, tan puesta en valor de mercado , por eso celebro tu poema, bellìsimo, certero, reparador del crimen del siglo XXI , asesinar los lenguajes, que sòlo reine el valor money