El cadàver de Chile
no ha muerto,
se sacude las balas y
limpia la sangre,
el Norte vuelve a ser el Norte
y el Sur el Sur,
sus cuatro puntos cardinales
llenan de oxìgeno sus pulmones,
millones se ponen de pie,
su alma vuelve al cuerpo,
recorren su querida geografía
àrida, fértil, accidentada
y alzan a Chile por los hombros,
en silencio, son los valientes
que vuelven a las calles
en la definitiva primavera de Chile
y todo Chile les ovaciona,
les pide que den una vuelta olímpica
por la angosta faja de tierra
hasta que retorne
la verdadera
democracia y libertad,
un país de oportunidades para todos.
Rolando Gabrielli©2019
1 comentario:
Gracias, poeta. Bellísimo. Lo compartiré.
Un abrazo,
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