En el azul de la mañana,
el día como si nada,
vuelve y fluye
insuperable en ese momento
y transcurre sin ninguna
intención aparente,
más que sorprendernos
a nosotros mismos
con esas formas invisibles
que se transformarán
en otras formas,
que algún día
posiblemente veremos abrir
la limpia página
de un nuevo día.
Rolando Gabrielli 2022
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