Lo que uno ve
es el espejo blanco
de la ciudad
y el mar que la sostiene
con la última línea
o principio de un nuevo horizonte.
Algunas aves de paso
mantienen su vuelo,
a pesar que el sol es el amo
del atardecer y no pareciera
despedirse tan fácilmente.
Un paisaje perfecto
compartimos en silencio
a la luz del sol.
Rolando Gabrielli2024
1 comentario:
Què hermosas son esas calles donde el azul se asoma, el agua, parece un lugar de mucha energìa.
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