MONTAÑA VIEJA, QUE ESTÁS EN LOS CIELOS

Del aire al aire, como una red vacía,

iba yo entre las calles y la atmósfera, llegando y despidiendo,

en el advenimiento del otoño la moneda extendida

de las hojas, y entre la primavera y las espigas,

lo que el más grande amor, como dentro de un guante que cae,

nos entrega como una larga luna

Sube conmigo, amor americano.
Besa conmigo las piedras secretas.

La plata torrencial del Urubamba

hace volar el polen a su copa amarilla.

Amor, amor, hasta la noche abrupta,

desde el sonoro pedernal andino,

hacia la aurora de rodillas rojas,

contempla el hijo ciego de la nieve

Piedra en la piedra, el hombre, dónde estuvo?

Aire en el aire, el hombre, dónde estuvo?

Tiempo en el tiempo, el hombre, dónde estuvo?

Macchu Picchu,

pusiste piedra en la piedra, y en la base, harapos?

Carbón sobre carbón, y en el fondo la lágrima?

Sube a nacer conmigo, hermano.

Dame la mano desde la profunda zona de tu dolor diseminado.

No volverás del fondo de las rocas.

No volverás del tiempo subterráneo.

No volverá tu voz endurecida.

No volverán tus ojos taladrados.

Mírame desde el fondo de la tierra,

labrador, tejedor, pastor callado:

domador de guanacos tutelares:

albañil del andamio desafiado:

aguador de las lágrimas andinas:

joyero de los dedos machacados:

agricultor temblando en la semilla:

alfarero en tu greda derramado:

traed a la copa de esta nueva vida

vuestros viejos dolores enterrados. Machu Picchu. Fragmentos del Canto General de Pablo Neruda


El icono andino, precolombino, incaico, esta maravilla de los Andes a la que le cantó Neruda en su Canto General, nos observa detenida en el tiempo como un sol misterioso, entre la oscuridad y el amanecer, donde el cielo comparte su espacio terrenal con los dioses Incas. Monumento a la historia de estos antepasados americanos, Montaña Vieja que estás en los cielos de El Perú, desciende con tus ángeles niños muertos, vuelve a nacer , Wayna Picchu, joven montaña que escalan los vivos, que respiran los muertos desde tus entrañas donde el sol alumbra por todos nosotros.
Machu Picchu es, según la lengua quechua, la Mayor de las Eminencias del Cerro. Montaña real la que vemos, enigma de todos los tiempos su existencia, morada del Inca y de sus vírgenes reales, ciudadela militar, vigía del tiempo y la adoraciòn...todos los enigmas para Machu Picchu...

Pareciera una postal detenida en el tiempo, un viaje al Sol adorado hace miles de años, un santuario que el tiempo no puede imaginar ni devolver al pasado, pero que lo retiene como una Estatua de Tiempo. ¿Dónde están los que aquí estuvieron? ¿Fue un refugio ante la conquista depredaroa española? pobres hipótesis suspendidas en el aire...la ruta, el silencio, la muerte Inca, la sangre devorada por ríos y montañas, desiertos de olvido.

Machu Picchu pareciera descansar en paz por los siglos de los siglos. Su primer sobresalto cuando el expedicionario estadounidense Hiram Bingham, guiado por campesinos, llegó al santuario en 1911 El profesor de Yale, al año siguiente se llevó piezas únicas del icono de Los Andes. La montaña mágica peruana, ha vuelto a ser noticia, por al demanda del gobierno andino a estados unidos y ese centro universitario, para que devuleva miles de piezas que le pertenecen a Machu Picchu.

"Los objetos permanecieron en poder de Yale durante el siglo XX, hasta que el tema fue retomado por el Gobierno de Alejandro Toledo (2001-2006), que decidió enjuiciar a la institución norteamericana para lograr la repatriación, sostiene una información de la Agencia española EFE. "Alan García, que asumió la presidencia el 2006, desactivó el juicio y propuso a Yale un acuerdo, que incluye la asesoría e investigación conjunta de los restos arqueológicos, apunta EFE.Las negociaciones están actualmente en un punto muerto, después de que el Gobierno de García reclamó la devolución de todas las piezas, en lugar de solo una parte, como contemplaba el "memorando de entendimiento".
Yale pretende devolver a Perú sólo 384 piezas en un plazo de dos años, con el propósito de exhibirlas en un museo, agrega la agencia española, que deberá construirse en la ciudad de Cuzco bajo especificaciones dictadas por la institución estadounidense.
En abril de 2008 el equipo del Instituto Nacional de Cultura (INC) de Perú informó de la existencia de 46.332 piezas en poder de Yale.